A propósito de los bloqueos en la vía panamericana por parte de indígenas caucanos, vale la pena reflexionar acerca de algunos temas puntuales.
El gobierno central negocia, promete y cumple a medias. Los indígenas luchan por sus derechos. El gobierno firma decretos autonómicos para sanear territorios ancestrales hoy habitados por otros, también con derechos y escrituras. Los indígenas aspiran recuperar "sus tierras" por su derecho ancestral, y los actuales propietarios defienden con todo sus derecho.
Entonces se presentan las vías de hecho, algunas sin duda cuestionables, como dañar vías, quemar tubería para el acueducto, violar el derecho a la movilización. ¿Quién viola a quién? Todo viola derechos humanos.
Si no avanzamos urgente en resolver todos nuestros conflictos dialogando, vendrán hoy las guerras por las tierras, mañana por el agua, luego por el alimento y esta cruel guerra con las FARC y ELN sólo será un nebuloso recuerdo.
Nadie dice nada: ni gobernantes ni aspirantes.
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