Puerto Tejada - Erotizando la muerte

Sacar un cadáver de una tumba para quemarlo, como ocurrió en Puerto Tejada, tiene muchas miradas:

1. La mezcla de saberes y la recuperación cultural nos pone en el evento de la permanencia de la vida aún después de la muerte. Un muerto que puede matar a sus propios asesinos es el sentir que mezcla brujería, maleficio, rezo, magia negra, santería. 

2. El deterioro social al que estamos llegando. Seguimos tocando fondo o llegando al subfondo.

3. Hemos erotizado la muerte.

Pasó en silencio el plantón de la Policía al frente de la Alcaldía de Puerto Tejada, al parecer porque no tenían combustible para cumplir su labor. Pero hay muchas críticas a los resultados en seguridad: El año nuevo hubo muertos a media cuadra de la policía, un bebé herido. La inseguridad es terrible en el Puerto. Algo va mal. Los resultados muestran que el combustible es sólo un pretexto porque el Alcalde si ha entregado recursos para esto, se conoce de fuente confiable. Hacemos un urgente llamado al Gobernador, al Comandante de la Policía y a los parlamentarios. Puerto Tejada es una super bomba que ha venido explotando y nosotros viendo pasar los muertos.

Puerto Tejada requiere una intervención integral de base comunitaria que parta desde los procesos educativos y socio-comunitarios. No es el muerto incinerado para que no siga asesinando, es el mensaje que se envía a la sociedad,  necesita actitud propositiva y compromiso ciudadano, necesita que juntemos capacidades para avanzar en soluciones reales. Es un S.O.S oportuno y urgente.

OSCAR OSPINA QUINTERO